El título “Odontología Biológica Claves para la Salud Sistémica” puede sorprender a algunos. Sin embargo, la odontología moderna reconoce la boca como parte integral del cuerpo y su impacto en la salud general.
La odontología biológica lleva esta comprensión un paso más allá, adoptando un enfoque holístico que integra el conocimiento del microbioma oral y la osteoinmunología y así es como lo emplea Omega Center.
Conexión entre la Boca y el Cuerpo:
Contrario a la creencia popular, la boca no está separada del cuerpo. El espacio interno de Pischinger, la boca, puede ser una vía importante para que los mediadores inflamatorios, bacterias y microorganismos lleguen a otras partes del cuerpo. Esta vía, incluso más importante que los sistemas cardiovascular o linfático, juega un papel crucial en enfermedades crónicas.
Microbioma Oral y Salud Intestinal:
Un estudio reciente titulado “¿Puede la microbiota oral afectar el microbioma del intestino?” revela que la ingestión de bacterias como Porphyromonas gingivalis a través de la saliva puede causar disbiosis en el intestino.
Ibn Sina y la Odontología Biológica:
Siguiendo la filosofía de Ibn Sina, la odontología biológica se centra en el tratamiento eficaz de los pacientes. Se divide en cuatro áreas clave: microbioma, osteoinmunología, materiales y sistema musculoesquelético, que se interconectan para brindar una atención integral.
Microbioma Oral:
La boca alberga 700 especies de bacterias, virus y hongos, incluso más que el colon. La saliva que tragamos transporta estos “invitados” al intestino, donde algunos, como Porphyromonas gingivalis, pueden alterar el microbioma intestinal y contribuir a la enfermedad de Alzheimer. Otras bacterias, como Aggregatibacter actinomycetemcomitans, aumentan el riesgo de cáncer de páncreas.
Enfermedad Periodontal e Inflamación:
Las bacterias patógenas destruyen los tejidos de la boca, causando enfermedad periodontal o periodontitis periapical. La inflamación crónica se esconde debajo de la línea de las encías, creando una herida periodontal.
Endodoncia y Salud Sistémica:
La desinfección completa del conducto radicular durante la endodoncia es casi imposible. La tasa de supervivencia a 10 años de los dientes tratados endodónticamente es solo del 80%, lo que genera preocupación en pacientes con enfermedades sistémicas.